- En 2013, el 22% de mujeres mayores de 65 años cuidaba de sus nietos
- Los abuelos tienen experiencia en el desarrollo del niño, reconocen si crece acorde con su edad
- Un buen ambiente familiar es determinante para el sano desarrollo de los niños
Durante la etapa de desarrollo físico y emocional de los niños todos los factores son determinantes para su desarrollo, un entorno familiar sano, una comunicación de calidad y brindarles estabilidad son la base para crear vínculos familiares sólidos. Hoy en día, debido al nuevo estilo de vida –en el cual ambos padres trabajan–, son los abuelos quienes pasan mayor tiempo con los niños y quienes están a cargo de su educación y vigilan su crecimiento.
Entrevistado en marco del Día de la Familia –que se conmemora el primer domingo de marzo– el doctor Armando Blanco, especialista en endocrinología pediátrica, comentó lo anterior y añadió que “actualmente es mayor el número de personas con posibilidad de ser abuelos, y de serlo por más tiempo. En México, durante la década de 1930 la esperanza de vida era de 34 años, mientras que en la actualidad asciende a 74.5 años. Según datos del INEGI, en 2013 el 22% de las mujeres mayores de 65 años estaba a cargo del cuidado de sus nietos, tres millones de niños se quedan en casa mientras las madres trabajan y un 61% de ellos se encuentran bajo el cuidado de los abuelos”.
El cuidado de los niños es una labor que requiere de mucha atención. Cuando los padres no pueden hacerlo, resulta benéfico para la salud emocional y física de los abuelos, pues reciben una nueva motivación y, al mismo tiempo, ayudan a fortalecer los lazos familiares, siempre y cuando estén dispuestos a enfrentar esta responsabilidad.
“De acuerdo con un estudio realizado por la Escuela de Salud Pública John Hopkins, los niños que quedan al cuidado de sus abuelos tienen la mitad de accidentes en casa, pero no sólo eso, sino que los abuelos tienen experiencia en las etapas de desarrollo de los niños y pueden saber si crece de acuerdo con su edad, en cuanto a las habilidades psicomotoras; también pueden detectar tempranamente síntomas y signos de alguna enfermedad, como lo es la talla baja por déficit de hormona de crecimiento”, reveló el doctor Blanco López.
La Organización Mundial de la Salud demostró que, durante la primera infancia, los niños de todo el mundo deben tener la misma velocidad de crecimiento y los factores que interfieren en la salud pueden entorpecer el desarrollo, es decir que una velocidad de crecimiento normal es el mejor indicador del estado de salud del niño.
El experto agregó que “mientras más temprano se identifiquen y corrijan estas alteraciones, el crecimiento del niño será el adecuado y alcanzará la estatura deseada, acorde con el potencial genético del crecimiento”.
Los niños necesitan de un entorno sano, de buen estado de salud, no sólo orgánica sino también emocional, por lo que el cariño y afecto por parte de los padres y los abuelos es indispensable. “La ayuda de los abuelos es sumamente valiosa para los matrimonios jóvenes, de esta forma los nietos reciben atención y cuidados oportunos que contribuyen a las necesidades integrales de crecimiento y desarrollo de los infantes”, finalizó el doctor Armando Blanco.
