Muchas veces los pacientes se preguntan por qué el médico le receto pastillas o insulina como tratamiento para mejorar sus niveles de glucosa en sangre, si a su familiar que también tiene diabetes le dieron un tratamiento muy diferente al que él lleva, piensan que el recetar insulina es sinónimo de que su salud se encuentra deteriorada.
Sin embargo no es así, el que a una persona le inicien un medicamento tomado como metformina, hipoglucemiantes orales o insulina, va a depender de si tiene resistencia a la insulina, intolerancia a los carbohidratos o si existe ausencia por completo de la secreción de insulina dentro de su cuerpo, por lo cual se tendría que suplir esta falta de secreción por insulina inyectada; otros factores que se pueden ver asociados son el tipo de diabetes, el peso, la edad, complicaciones asociadas o estado fisiológico como el embarazo.
Como se vienen comentando, si lo podemos comprender el tratamiento tendrá que ser individualizado para cada paciente, tomando en cuenta sus necesidades y características; también no hay que olvidar que la diabetes es una condición crónica, por lo cual en algún momento el páncreas va a ser insuficiente para producir la insulina que se necesita en el cuerpo, por lo cual se va a necesitar aplicar insulina inyectada, pero hay que recordar que esto no significa que el paciente no se haya cuidado o que este en las últimas, simplemente es un paso más en el tratamiento.
