Incontinencia Urinaria en Mujeres Deportistas

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La práctica constante de algún ejercicio físico o deporte es un factor clave para  mejorar la salud en cualquier ciclo de vida, ya que gracias a esto se fortalecen los huesos, el corazón, los pulmones y se tonifican los músculos; además de controlar el peso, por ello simplemente es una de las cosas más importantes para conservar o mejorar la salud en general.

En el caso específico de las mujeres que practican de manera profesional o amateur algún deporte que implique cierto grado de esfuerzo físico, es muy probable que una de las consecuencias adversas que pueden presentar sea problemas en el suelo pélvico, mejor conocida como Incontinencia Urinaria.

Cabe señalar que este padecimiento se define según la Sociedad Internacional de Continencia, (ICS) y la Asociación Internacional Uroginecológica (IUGA), como la pérdida involuntaria de orina la cual genera problemas de tipo social e higiénicos que afectan la calidad de vida de quienes la padecen. En general, existen tres tipos de incontinencia conocidos como: Incontinencia Urinaria de Urgencia, por Esfuerzo y Mixta[1].

Todas las mujeres están propensas a padecer fugas de orina, sin embargo las deportistas que realizan ejercicios de alto impacto y gran exigencia física poseen un índice más alto de  presentar Incontinencia Urinaria por Esfuerzo, esto se debe a la frecuencia con que se practica ejercicio, el historial deportivo y el arduo trabajo  que se realiza durante la actividad física, el cual aumenta la presión en el interior del abdomen y ésta se transmite directamente a la vejiga ocasionando el debilitamiento de los músculos y el suelo pélvico.

Entre las actividades que generan mayor niveles de presión abdominal están: los abdominales clásicos, el atletismo, el baloncesto, el aérobico, el tenis y clavados.

Muchas veces padecer de incontinencia urinaria puede ser una limitante para practicar alguna actividad deportiva e incluso abandonarla por completo, por esta razón no debe pasar desapercibida por los profesionales del deporte y del ejercicio físico.

“La mejor recomendación en estos casos es acudir a la consulta médica para ser valoradas por un especialista, quien a través de diversas pruebas y estudios puede determinar el mejor método para solucionar este problema que van desde medicamentos, dispositivos mecánicos, ejercicios de kegel, bioretroalimentación y tratamientos farmacológicos los cuales sirven para modificar la contractilidad vesical.” Comentó el Dr. Victor Manuel Vargas Hernández ex Presidente del  Colegio Mexicano de Ginecólogos dedicados a la Colposcopía, y miembro Colegiado Titular Emérito del Colegio de Médicos Especialistas de Ginecología y Obstetricia A.C.

 

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