El principal objetivo es que la herida cicatrice tan pronto como sea posible, de esta forma se puede evitar una infección. El primer paso para curar una herida es mantener los niveles de glucosa en sangre en un rango saludable.
Una vez identificada la lesión en cualquier otra parte del cuerpo es importante que identifiques con qué te has hecho la herida, ¿fue en casa?, ¿fue con un artefacto sucio o en la calle? Revisa la profundidad y realiza una limpieza básica de la lesión.
También es importante:
Si la herida se ha producido en los pies, alivia la presión inmediatamente, siguiendo estos consejos y sobre todo manteniendo la glucosa dentro de rango, conseguirás que el proceso de cicatrización sea más rápido y por lo tanto evitarás complicaciones.
Referencias: