Una de las características más importantes que ocurren durante la adolescencia es el cambio que los chicos y chicas viven en su forma de pensar y entender la vida y que afecta a sus relaciones sociales y familiares. Y este es un fenómeno que afecta a todos, incluidos los chicos que tienen diabetes.
Hasta ahora, tu hijo estaba en tus manos y dependía de ti. Pero ahora, parece que quiere hacer su vida y que empieza a plantearse cosas para las que ya no te necesita, pero no te dejes engañar por esta apariencia pues sigue necesitando y requiriendo que lo guies. Además, ahora sólo parece que le importa lo que piensen sus amigos, y vuestra opinión parece no contar; es más, hace exactamente lo contrario de lo que le indicas.
La percepción que tenía de sí mismo empieza a cambiar, y aparecen nuevas dudas e inseguridades que hasta ahora no se había planteado. Respecto al hecho de tener diabetes, también surgen ciertas preguntas y temores como:
- ¿Podré llegar a ser lo que quiera?
• ¿Me querrán a pesar de tener diabetes?
• ¿Qué futuro me espera?
• ¿Qué puedo decir cuando me pregunten sobre la diabetes?
• ¿Qué pensarán de mí?
• ¿Cómo decírselo a mis amigos o a alguien que me gusta?
• ¿Resultaré igualmente atractivo a pesar de tener diabetes?
• ¿Qué hago si quiero mantener relaciones sexuales?
• ¿Por qué a mí? ¿Soy “defectuoso”?
• No volveré a ser el mismo.
• Nadie me querrá.
• Soy raro, diferente del grupo.
• Mujeres: no podré tener hijos.
• Me paso el día pendiente de la diabetes.
• Si ahora no estoy bien, luego estaré peor.
Para poder facilitar la comunicación con tu hijo, es importante que tengas en cuenta las preocupaciones y miedos que se le pasan por la cabeza, ya que es probable que en esta etapa adolescente el niño viva una sensación de rechazo hacia la enfermedad y hacia todas las obligaciones que esta conlleva, con el consecuente descuido en el tratamiento de su diabetes.
La actitud del entorno familiar, especialmente de los padres puede influir positivamente en la motivación del adolescente respecto al control de su diabetes y en su adherencia al tratamiento.
Aspectos familiares que influyen positivamente en los adolescentes con diabetes:
Habla con tu hijo, sin juzgar, de lo contrario él se cerrará. La premisa básica de ello es, si queremos que nuestros hijos nos cuenten, tenemos nosotros también que contarles a ellos. Recuerda que somos su ejemplo para lo bueno y lo malo. Por ejemplo cuéntale que has hecho hoy en el trabajo.
Convéncele de que tener diabetes no le hace diferente. Es más, si quiere hacer cosas como los demás, lo más importante es que se siga cuidando para poder hacer lo mismo que sus amigos sin peligro.
Comunicación amplia, no centrada en la diabetes. Cuando llega de clase no le preguntes por la diabetes en primer lugar. Pregúntale por sus amigos, estudios… y después por la diabetes.
Entiende por lo que está pasando y recuerda como eras tú a su edad.
Ante un fallo, considéralo como una oportunidad de aprendizaje… “ya sabemos lo que tenemos que hacer para la próxima vez”.
Ofrécele explicaciones razonadas y no impuestas o basadas en el “porque sí o porque lo digo yo” y hazle participar en las decisiones.
Mantened la coherencia entre los padres. Ambos en la misma dirección, si hay desavenencias entre vosotros, acordad una postura antes de dar una respuesta a tu hijo.
Haz un traspaso gradual de la responsabilidad. Ha de ser un proceso paulatino y siempre en función de la madurez y capacidad del adolescente.
Sé coherente con las exigencias y objetivos marcados.
Escucha su opinión aunque no estés de acuerdo.
Trata a tu hijo con independencia de su diabetes. Exige y elogia sus logros igual que si no la tuviera.
Hay que procurar llevar la diabetes lo mejor posible en todo momento, pero no olvides que la perfección no existe.
Reconoce, felicita y premia el esfuerzo y no el resultado.
No olvides que a pesar de sus intentos de distanciamiento y conductas agresivas, el adolescente te necesita cerca y aunque diga “paso de la diabetes” no es cierto pues no conozco ningún adolescente con una HbA1c de 10 y que esté contento…
Fuente: Bayer Diabetes Care
